lunes, 29 de octubre de 2007

Los empleados tóxicos

La semana pasada hemos leído varias noticias (Cinco Días, Expansión y Empleo, los gratuitos del metro...) sobre los empleados tóxicos a raíz de un informe publicado por la consultora Otto Walter. Expansión y Empleo nos facilita copia del informe.

Básicamente hay 7 tipos de comportamientos de los empleados tóxicos:
- generar conflictos
- la holgazanería (escaqueo)
- la incompetencia
- El fraude, las mentiras y los robos
- La pérdida de tiempo intencionadamente
- Los anti-jefes
- La arrogancia

En un post anterior ya hablé de Los 10 pecados capitales del jefe, pero ahora toca dar cera a los empleados. Yo, personalmente he tenido que trabajar como jefe, con personas que cumplían con algunos de los comportamientos mencionados, concretamente el del escaqueo, la incompetencia, la pérdida de tiempo y, afortunadamente no en tantas ocasiones, comportamientos anti-jefe, de arrogancia y de generar conflictos. También los he sufrido en compañeros de trabajo y, sinceramente, a veces se les sufre más que como jefe.

A fin de cuentas las empresas están formadas por personas y, aunque presuponemos unos estándares de profesionalidad, me temo que nos encontramos de todo, y es que es muy difícil detectar estas actitudes negativas en las entrevistas de selección. La del escaqueo es una de las más sangrantes, en mi opinión, pues demuestra una falta de respeto al resto de los miembros del equipo, dado que lo no hagas tu lo tendrá que hacer otro. La incompetencia yo creo que es más un problema de liderazgo y de gestión adecuada de recursos, pues hasta el más competente realizando determinadas tareas puede ser incompetente realizando otras. La pérdida de tiempo es algo endémico en nuestra cultura mediterránea, y antes que me critiquéis me defenderé argumentando que somos el país que más horas trabajamos y menos productivos somos, así que algo de tiempo perderemos todos.

Las actitudes más tóxicas son en mi opinión la de los anti-jefes, con los que es muy difícil lidiar, la arrogancia de los que no escuchan y creen estar en posesión de la verdad, y los que generan conflictos innecesarios.

En cualquier caso he de deciros que en mi vida profesional la mayoría de las personas que me he encontrado son buenos y competentes profesionales y personas, y aunque de los anteriores me he encontrado, creo que constituyen solo el 5% de los empleados (O sea, o he tenido suerte con la gente con la que he trabajado, o soy muy optimista y condescendiente con las personas)

Y vosotros, ¿os habéis encontrado con compañeros o empleados tóxicos? ¿Alguna anécdota que queráis compartir?

1 comentario:

Diego Rodríguez dijo...

Siempre he mantenido que el mayor activo de las empresas son sus empleados, y por tanto creo a pies juntillas que el futuro de una compañía pasa por la valía de sus RRHH, sin embargo también considero que uno de los problemas más graves que puede tener una empresa es la proliferación de los empleados tóxicos. ¿Por qué? Sencillo, si en un equipo introduces a una persona experta en cualquiera de los 7 tipos de comportamientos, tendrá un efecto metástasis en el grupo que por la teoría del "círculo vicioso" acabará destruyendo el equipo por las envidias y comparaciones ("éste viene siempre a las 10.30, yo no voy a ser menos"...)

Es muy peligroso, pero el problema reside en cómo detectar a esos empleados, porque normalmente deben ser sus compañeros los que reporten esas situaciones. Y además, en muchos casos también es complicado erradicar esas situaciones porque suelen ser empleados con solera que no aceptarán de buen grado una reconducción de la situación y en casos extremos, será muy costoso de despedir.